sábado, 26 de enero de 2008

Campanas...


Camino, con los ojos puestos en nada y en todo. Me cruzo con muchas personas pero no nos vemos...Cada uno en lo suyo entre reloj, obligaciones y prisas.

De pronto las oigo...son campanas, las de la iglesia ellas, siento que hace un montón que no las escucho, miro la hora : y media, claro por eso suenan. Me asusta este asombro porque seguro pasé más de una vez por aquí y estarían sonando pero así es...nuestra vida urbana encajada entre el reloj y la prisa calzada casi.

Ah! y también vi las palomas que viven por allí y hasta ganas de darle migas de pan me dieron y allá, un poco más allá del otro lado de la plaza había una niña que eso hacía y me vi...

Qué suerte que aquellas me hicieron apreciar todo esto; aquellas campanas, esas palomas esta niña....

2 comentarios:

*AntagoniSta* dijo...

Y hoy me pasó algo parecido....

Descubrir un paisaje nuevo en una calle que frecuento todos los días, dos veces por días... y se siente hermoso, no?

Mar y Sol(a veces tenue y otras no) dijo...

Totalmente Antagonista, y son necesarios como el aire esos descubrimientos...
Un abrazote