El mate...

Atrás el mar, cuyo sonido va y viene como las olas. A mi lado el termo, en mi mano el mate ese eterno compañero, que hace que cuando uno se instala por ahí con él, se sienta acompañado, que sabe de historias diversas, de las de las charlas interminables , mientras él cambia de una mano a la otra, haciendo las pausas necesarias para pensar, para reflexionar o sencillamente para mirarlo buscando las palabras que se resisten a salir a veces...
Es el mismo que acompañó noches de estudio, tardes de playa, mañanas tranquilas, días felices y también los nublados y oscuros...
El que se toma en familia como una previa los domingos mientras se espera la comida, ese que cae bien a la hora que sea, porque sabés que es el disparador de confidencias...
El mismo que en esos días de mucho laburo te lo hace menos costoso porque nos obliga a la pausa, porque tenerlo en las manos nos hace mirar el entorno lo que nos lleva a despejarnos de lo que estábamos haciendo...
El mismo que adornó reencuentros con amigos que estaban lejos y añoraban esas tardes con él como moderador, mientras los temas saltaban desde lo más sublime a lo más elemental...
Mientras lo tenemos en la mano, hasta el más ansioso(a) casi por respeto escucha mansamente..
Hay quienes lo tienen largo rato cual micrófono, quienes lo toman rápidamente, quienes lo toman de a poco haciendo una pausa en su conversación, hay tantas maneras...
Si este mate hablara...qué historias contaría o tal vez qué maestro sería...



Por si alguien no sabe qué es el mate dejo un enlace donde se explica algo, aunque les digo que como todo para entender hay que tomarlo...y en el Río de la Plata creo que casi todos aunque sea alguna vez en la vida hemos disfrutado de él...
http://www.rau.edu.uy/uruguay/cultura/mate.htm